El CEO del segundo banco más grande de Estados Unidos, Brian Moynihan compartió sus perspectivas sobre los posibles impactos macroeconómicos que los consumidores estadounidenses podrían experimentar en medio de una semana de actividad intensa en Wall Street.
En un mensaje emitido durante una entrevista en «Morning With Maria«, Brian Moynihan, presidente y director ejecutivo de Bank of America, describió cómo las preocupaciones sobre la inflación, la gestión del talento interno en las empresas y las tasas de interés más elevadas están influyendo en la dinámica empresarial. Moynihan observó que, a medida que se adentran en las empresas más grandes, se ha notado una disminución en la utilización de líneas de crédito, lo que sugiere un incremento en el costo del crédito. Esto, a su vez, ha llevado a una mayor precaución en la forma en que las empresas gestionan sus recursos financieros. Además, Moynihan destacó que las condiciones para obtener préstamos se están volviendo más restrictivas, lo que previsiblemente conducirá a una desaceleración económica.
El incremento en las tasas de interés también ha sido un tema de conversación importante. La Reserva Federal ha aumentado las tasas en numerosas ocasiones desde marzo del año anterior, elevando la tasa de los fondos federales a su nivel más alto en más de dos décadas, situándola en un 5,5%. Moynihan exploró cómo estos cambios en las tasas de interés han influido en las decisiones tanto de las empresas como de los consumidores.
LAS GANANCIAS DE MORGAN STANLEY SE DISMINUYEN A MEDIDA QUE PERSISTE LA CAÍDA DEL ACUERDO
En este contexto económico complejo, es fundamental profundizar en las implicaciones que estas dinámicas tienen en la vida de los consumidores estadounidenses y en la salud general de la economía. La persistente presión inflacionaria ha sido una fuente constante de preocupación, y las cifras reveladas por el Departamento de Trabajo confirman que esta presión no se ha aliviado. El índice de precios al consumidor, que abarca desde el costo de la gasolina hasta los gastos en comestibles y los alquileres, experimentó un aumento del 0,4% en septiembre en comparación con el mes anterior.
El incremento en las tasas de interés, otro factor importante en el panorama económico, ha traído consigo un conjunto de desafíos adicionales. La Reserva Federal ha llevado a cabo un aumento sostenido en las tasas, elevándolas en once ocasiones desde marzo del año anterior. Esto ha llevado la tasa de los fondos federales a su nivel más alto en más de dos décadas, alcanzando el 5,5%. Esta política de la Reserva Federal tiene implicaciones significativas tanto para las empresas como para los consumidores. En particular, las tasas de interés más altas han tenido un impacto en áreas altamente sensibles a los cambios en las tasas, como el mercado de viviendas y las solicitudes de hipotecas, que han disminuido debido a que las altas tasas han llevado a una mayor precaución en la inversión.
Además, el sector automovilístico se ha visto afectado de manera similar, ya que las tasas más altas han influido en las decisiones de compra. No obstante, un efecto aún más significativo se ha manifestado en la disposición de las personas a solicitar préstamos. Tanto a nivel personal como empresarial, las tasas de interés más elevadas han contribuido a que las condiciones crediticias se vuelvan más rigurosas, lo que está alineado con los objetivos de la Reserva Federal para regular la economía.
According to BofA US and global economist Shruti Mishra, overall spending appears to have slowed since Labor Day. Though recently, there has been an uptick in spending on fuel and electronics. Take a closer look: https://t.co/qyYtbNbOJE
— Bank of America (@BankofAmerica) October 4, 2023
A pesar de estos desafíos, es alentador observar que, a pesar de una modesta desaceleración, el gasto de los consumidores estadounidenses todavía muestra un crecimiento anual del 4%. Esto representa un gasto anual que supera los 4 billones de dólares a través de una variedad de métodos de pago, desde tarjetas de crédito hasta pagos en efectivo y cheques. Si bien se ha producido una desaceleración, esta tasa de crecimiento sigue siendo considerable. Brian Moynihan destacó que este nivel de gasto es más consistente con una economía caracterizada por una baja inflación y un crecimiento económico moderado.
Sin embargo, vale la pena señalar que la combinación de la inflación y las tasas de interés más altas ha llevado a una disminución general en la actividad del consumidor. Esto se ha manifestado en una desaceleración en las ventas minoristas y en una mayor cautela en las decisiones de gasto. Las personas están reevaluando sus prioridades financieras y ajustando sus hábitos de consumo en respuesta a este entorno económico cambiante.
En cuanto a las perspectivas futuras, las declaraciones del presidente del Banco de la Reserva Federal de Filadelfia, Patrick Harker, en las que indicó que las tasas podrían mantenerse sin cambios, han suscitado discusiones sobre el posible rumbo de la economía. Brian Moynihan compartió las previsiones de los economistas que sugieren que se producirá una desaceleración económica en la segunda mitad de 2024, con un crecimiento anualizado de aproximadamente medio punto porcentual en el segundo y tercer trimestre de ese año.
En un tono más positivo, Bank of America anunció resultados trimestrales mejores de lo esperado, con un aumento del 10% en los ingresos netos, que alcanzaron los 7.800 millones de dólares. Brian Moynihan expresó su confianza en la empresa y destacó que los ingresos netos por intereses, uno de los principales impulsores de ingresos, se están estabilizando y se espera que aumenten en función de la evolución futura de las tasas de interés. Esto es una señal alentadora y un testimonio de la fortaleza financiera de la empresa, a pesar de las difíciles condiciones económicas.
Redacción gossipvzla con fuente foxbusiness